sábado, 27 de julio de 2013

s03e23: Verano raro (4ºentrega) Soda Stereo (25 de julio de 3013)

Buenas noches Miqui...esta noche vamos a continuar con nuestro verano raro...en esta ocasión te llamo para hablarte de una banda, pero no una banda más: te imaginas una banda que es más famosa que los Beatles, que su separación y posterior gira de reunión fue más impactante que la de los Héroes del Silencio...una banda que vendió millones de discos y hizo cientos conciertos, pero que si preguntas a cualquier hipsters/popero/gafapasta medio no tiene ni idea de quién son?...sí, sí que es raro, pero ellos se llamaban Soda Stéreo y tenían canciones tan buenas como estas:


Sí, esta noche te quiero hablar de Soda Stereo, la banda de Gustavo Cerati, Charly Alberti y Zeta Bosio, que fue famosa no lo siguiente en toda latinoamérica, sobre todo en su Argentina natal , pero también en Chile, Mexico, Ecuador o Perú (y no sigo que todos sabemos de lo que estoy hablando) y que en España y por supuesto en la escena anglosajona pasó sin pena ni gloria, a pesar de que tuvo algunos fans famoso como Bono de U2 o la The Police sin Sting, tanto que Andy Summers llegó a ofrecerle a Cerati grabar un disco de The Police sin Sting...sí, sí...pero esa es otra historia 

Desde el año 1984 al 88 Soda Stereo edita discos como Nada personal o Signos, llenos de canciones mágicas, como Juego de Seducción o Signos, donde se mezcla el ska, la nueva ola o afterpunk de la época. Discos notables en los que sobre todo se destaca la capacidad como compositor de Cerati y sus letras, crípticas y oscuras, con un punto poético de esos que tanto gustan en aquella época a los seguidores de The Cure o Joy Division. Están en la misma liga de otras grandes bandas, también desconocidas por estos lares como Sumo, Virus, Los Redonditos de Ricota o solistas como Charly García... a final de los ochenta ya son muy famosos, graban en Nueva York con Carlos Alomar, que había sido guitarrista de Bowie y en sus conciertos en directo les hacen los coros las Supremes de Diana Ross...son habituales en las revistas del corazón, en Argentina uno puede ser rockero y salir en el Hola (allí se llama El Caras), sin problema...no sé si más famosos que Jesús, pero sí más famosos que los Beatles... el momento álgido llega con el final de la década: su maravilloso LP Canción animal fueron la primera banda en Argentina, y claro, en toda latinoamérica que editaba en cd. Este disco, Canción animal fue el que más éxito tuvo en sucarrera fue publicado en el año 1990 y contenía su canción más conocida, De música ligera. Auténtico hit, si te parece bien, te lo voy a poner para que lo escuches:

 Cumpliendo todos los preceptos de las grandes bandas de rock, después del disco mayúsculo, comienza la desintoxicación en todos los niveles, habían tocado para medio millón de personas en Buenos Aires, en un concierto gratuito en el año 91, se habían convertido en auténticos dinosaurios del rock...así que tenían que dar un viraje...y claro, a principios de los noventa, ¿qué hacían las grandes bandas para demostrar que todavía podían seguir siendo modernos?...claro que sí, Miqui, lo que hacían era entregarse a la electrónica....Soda Stereo no fue menos, auspiciado por un movimiento que se llamó rock sónico, en el que estaban, entre otros, Juana La Loca, Martes Menta o los Babasónicos, se mezclaban las programaciones con las guitarras ácidas...para no faltar no les faltó a los Soda Stéreo ni su propio Brian Eno...en este caso, Daniel Melero, un músico del underground porteño, con el que había trabajado Cerati en un disco en solitario y había sido miembro de una de las primeras bandas de tecnopop argentina, los Encargados. Con Daniel Melero se recluyeron y grabaron uno de los disco más experimentales de la historia: Dynamo. Aquel disco contenía en su libreto una máxima imperecedera: ¿Dónde está la música, en los cables? Y sonaba así (pon un fragmento, unos segundos)

Giras por toda latinoamérica, te estoy hablando de ochenta o noventa conciertos en cuatro meses...aún tienen tiempo de grabar un LP más, Sueño Stéreo y, como no podía ser de otra manera para la época, el MTV Unplugged de rigor, ¿te acuerdas de los desenchufados de los noventa, no Miqui, pues los Soda también grabaron uno, que se llamó Comfort y música para volar y apareció en el año 1996. El agotamiento era evidente, los tres querían encarar proyectos personales y el 1 de Mayo de 1997 en un comunicado de prensa anunciaban su separación, que terminó, en realidad, con un concierto en el estadio de River Plate y el consiguiente doble directo.

Pero la historia, claro,
no termina aquí: Charly Alberti, Zeta Bosio y Gustavo Cerati continúan con sus proyectos en solitario y en cada entrevista que les hacen durante la siguiente década les preguntan por la vuelta de Soda Stéreo. Como no podía ser de otro modo y como sucedió con otros dinosaurios como los Eagles, los Héroes del Silencio y mil bandas más...y claro, al final, vuelta a empezar: en el año 2007 anuncian que vuelven, la gira se llamará Me verás volver (como un verso del tema En la ciudad de la furia): veinte conciertos y más de un millón de personas viendo la vuelta de Soda Stéreo. Eso sí, Cerati dijo desde el principio que "La vuelta de Soda es una burbuja en el tiempo" y al final del último concierto la burbuja explota y se acabó. No más Soda Stéreo.

Un par de años más tarde, por cierto, Gustavo Cerati sufre un infarto cerebral después de un concierto en Caracas. Desde entonces se encuentra en coma y con respiración artificial. Algo más en la leyenda de los Soda Stéreo...esta situación triste y rara...
pero bueno, nos quedamos con lo bello y lo extraño también, porque son bellísimas las canciones de Soda, desde sus comienzos afterpunk, newwave, pasando por la mirada hacia el soul y el funky de los ochenta, las guitarras en los noventa, con la música alternativa y el grunge y el invitable viraje a la electrónica de finales de los noventa...casi de manual..miles de discos vendidos, millones de personas viéndolos en directo...y aquí, ya te digo, pocos modernos con conocimiento de causa...espero que te haya gustado Miqui...te dejo con un tema, mi favorito, se llama Persiana Americana...hablamos pronto: 


s03e22: Los tucanes (verano raro 3ºentrega)




La noche de los raros, de los especiales, la noche al margen. Hemos escuchado este tema, que en su versión original aparecía en el año 1989 en el disco De espaldas a ti de Esclarecidos. Me da vergüenza hablar de los Esclarecidos con un tipo como tú, que sé que eres fan absoluto. Esclarecidos, además de por la maravillosa voz de Cristina Lliso, eran conocidos por los arreglos imaginativos de sus temas, que podían jugar con la canción de autor, el pop arty e incluso con devaneos con el jazz...las letras, unas veces crípticas, otras más poéticas, pero siempre originales las componía Alfonso Pérez, marido de Cristina, que comenzó como batería para acabar solamente escribiendo letras...bien, pero este tema, justo este tema no lo escribió Alfonso, es obra del poeta maldito Javier Corcobado,que entregaría otro texto maravilloso en Noche de hiedra y la Mala Rosa, en una trilogía de una belleza increíble...Corcobado otro raro del pop español, pero raro oficial y nosotros no somos mucho de burocracia en Can Tuyus. Una canción sobre un tucán, animal exótico donde los haya...¿y esto, a qué viene, Octavio? Pues que la siguiente canción que le viene a la cabeza a uno cuando habla de Tucanes...es una que grabó Sergio Algora en el primer disco de la Costa Brava...y hoy, que estamos en la noche del aniversario de la muerte de Sergio, te voy a poner un poco del tema: se llamaba 1 de septiembre del año 2000

Te voy a poner en situación, Miqui. Después de la separación de El Niño Gusano, por cierto, el otro día estuve con Pedro Vizcaíno de Grabaciones en el Mar y me compré el último LP de Joaquín Pascual, el de Josh Rouse y la reedición en vinilo de El escarabajo más grande de Europa, monta una banda que tendrá su espacio en este verano de raro, Muy Poca Gente, junto con Rafa Domínguez, que compagina la banda con Sergio (del que era amigo desde críos y con el que había montado una banda de adolescentes, Tras el francés) con su labor como guitarrista de Enrique Bunbury. Graban un LP y un EP y tienen que separarse, entonces Fran Fernández, que había estado en Australian Blonde y quería una banda para grabar sus canciones en castellano empieza a frecuentar Zaragoza y entre juergas (muchas) y ensayos (pocos) deciden junto a Eloy Cases y Dani Garuz montar La Costa Brava. Y comienza el delirio: la capacidad compositiva deAlgora en comandita con Dani Garuz se combina con el talento costumbrista de Fran Fernández para generar un torrente de canciones: primero Déjese querer por una loca, grabado en el Puerto de Santa Maríajunto a Paco Loco en los primeros meses de 2003. El disco aparece con Grabaciones en el Mar y contiene una versión de una banda que no había grabado todavía nada, una banda que tenía un nombre rarísimo: Kiev cuando nieva. El tema se llama 2 de septiembre del año 2000. O al menos es lo que pone en la carátula del cd-demo que me enseña Sergio Algora una tarde que estoy en su antigua casa, en la de Espoz y Mina, justo encima de lo que será el Bacharach años después. Yo le estaba entrevistando para un fanzine y entre whisky con hielo y whisky con hielo surge el tema de esta canción. Sergio me dice que una mañana, tras una noche difícil, se despierta con un cd copiado sobre el pecho. Recuerda poco a poco que dos chicos jóvenes se le han acercado mientras pinchaba en un garito, la Caja de los Hilos y le han pasado la maqueta. Sergio la guarda sin más en un bolsillo y al día siguiente queda abandonada en un rincón de la casa. Y allí se hubiera quedado si no llega a ser porque Fran, baja a ensayar los temas que irían en ese disco, Déjese querer por una loca, y se queda a dormir en casa de Sergio. Buscando entre los discos encuentra la maqueta, la pone y cuando escucha el tema se queda fascinado, dándole la brasa a Sergio para que la grabe. El tema es que saben que el grupo se llama Kiev cuando nieva pero no saben mucho más de él, ni de los chicos que la habían grabado ni nada de nada. No había internet o no estaba tan desarrollado como ahora. Ellos graban el tema y a Fran le ha gustado tanto que ese mes de Julio que vuelven a bajar a Puerto de Santa María a grabar los Días más largos, que pasa de ser un EP con tres temas para acompañar a Hazte camarera se convierte en el segundo LP que graban en menos de un año. Fran incluye su propia versión del tema de Kiev cuando nieva, esta vez le cambia un poco el título.

Esta versión la habían grabado en noviembre del año 2002. En los créditos de los discos ponía que los autores eran Kiev cuando nieva, pero que nunca habían grabado un disco y no se sabía muy bien quiénes eran en realidad. Aún llegarían a grabar un nuevo LP, el tercero en menos de un año, Se hacen los interesantes, que incluye los registros de algunas de las versiones que tocarían en el Festival Periferias de aquel año en Huesca (como la ya mítica versión de los Módulos, del Nada me importa) y, continuando con su tradición de grabar canciones inéditas, incluyen una de Sebas Puente que nunca ha grabado Tachenko: Favorita. Todo el mundo habla de La costa brava, de sus tres discos en menos de tres meses, de los conciertos a domicilio que hacían casa por casa...y la gente, los indie fans, olvidan a Kiev cuando nieva y aquel misterioso tema 2 de septiembre del 2000.


Años más tarde, conocí a Javier Aquilué, en circunstancias mucho más prosaicas que una noche de psicodelia y baile. Kiev cuando nieva se formaron en Cuenca, en la escuela de Arte, Antxon Corcuera y Javier Aquilué estudian Arte y comparten su gusto por la música folk, el ruidismo y el pop psicodélico. Hacen programas extraños de radio y componen sus primeros temas juntos. Concretamente su primera maqueta. Aquella maqueta fue moviéndose de discográfica en discográfica y sobre todo Acuarela pareció interesarle publicarla, pero tras marearlos mucho, al final no la sacan. Esa desazón hace que los Kiev cuando nieva paren un tiempo, pero es justo en ese momento cuando La costa brava graba su tema y los convierte en el secreto mejor guardado del indie. Inéditos y misteriosos. Recuerdo que al principio de conocer a Javier le pregunté por el misterioso título de la canción; 2 de septiembre del 2000. Javier, discreto como es él, se encogió de hombros y me dijo: en realidad es el segundo corte de la maqueta, lo de septiembre del 2000 es que lo grabamos aquel mes...todo el misterio, las cábalas, las interpretaciones misteriosas, desaparecidas...


Aldente

Todos los años, durante las primeras semanas del verano, me acuerdo mucho de Sergio Algora. Cada día que pasa me doy más cuenta de que su ausencia (como la de Félix Romeo) ha dejado a Aragón huérfana de talento, ilusión y rebeldía. Somos como muertos vivientes caminando por las plazas vacías de Zaragoza esperando que alguien nos ofrezca tomarnos un gintónic en una terraza. Pero seguimos adelante porque apretar los dientes con fuerza nos permite marcar el ritmo en el baile. Estos días he estado escuchando canciones que me recuerdan a Sergio, canciones de labios muy rojos, de gafas de sol y vermut con sifón: la primera versión de Xavi de Peret con unos bajos que años después copiarían los Stone Roses. También aquello de "más violines, más violines", como disco imposible en el que Scott Walker graba, con arreglos de Burt Bacharach, en español la Puerta del Amor en la versión de Nino Bravo. Cuando David Byrne se atiborraba de sonidos latinos, Sergio llevaba tiempo tocando con una banda que se llamaba Muy Poca Gente y con los que hacía en directo una versión de Os Mutantes, una mezcla de pop anglosajón, psicodelia y raíces brasileñas: El Justiciero. Buceando entre joyas escondidas de los sesenta españoles, Sergio seguía las huellas de Fernando Arbex para amar a Juan Pardo, pero eligió Nada me importa de Los Módulos para que sirviera de resumen de su vida. Salvó en su inmenso corazón canciones de trepanación y monos pero acabó reverenciando a Germán Coppini, elegiendo como el tema perfecto Escenas olvidadas de Golpes Bajos. Cuentan las esquinas que Algora cantaban en francés porque sabía que le iba a tocar escribirle letras a Gainsbourg en el cielo, así que, todas las noches, antes de la hora del champán, enciendo mi tocadiscos y pincho Capri c'est fini de Herve Vilard.

Columna aparecida en el Heraldo de Aragón del 27 de julio de 2013